El Ayuntamiento de Arrasate ha iniciado la elaboración del inventario municipal del amianto
25/11/2024El Ayuntamiento de Arrasate va a realizar un inventario municipal del amianto a lo largo de los próximos meses. El Ayuntamiento ha enmarcado estos trabajos de análisis dentro de las labores de "prevención sanitaria de la población", ya que el amianto es muy perjudicial para la salud, habiendo demostrado que causa cáncer. La ley, aprobada en 2022, obliga a los municipios a elaborar un censo de todos los edificios y emplazamientos que contengan amianto.
Mapa interactivo de edificios y plan de acción
Con este estudio se pretende realizar un mapa interactivo de los edificios que contienen amianto. De esta manera, antes de realizar las intervenciones, el Ayuntamiento será consciente del riesgo del amianto. Estos datos se incluirán, además, en una base de datos de la CAPV para identificar los edificios afectados en un censo conjunto.
En el informe final, además de recoger el censo completo de amianto, se incluirá un plan de acción asociado a un calendario.
Análisis por fases
En un nivel inicial se realizará un estudio histórico de los edificios. Para ello se analizará la información recogida en el archivo municipal para conocer los proyectos y usos históricos en torno a los edificios.
También se realizará un análisis por ortofotografía, es decir, análisis aéreo para analizar los materiales presentes en la superficie de los edificios, identificando la posible presencia de amianto. Esta técnica es de gran utilidad en el estudio de polígonos industriales.
También se realizará un estudio de la red de abastecimiento de agua. Debido a que estas infraestructuras se encuentran bajo tierra, y no están a la vista, por lo que se realizará un estudio especial. Para ello se analizará la edad de la red de abastecimiento de agua de la localidad, de esta forma, se le añadirá una capa adicional al mapa de estudio, para poder observar las posibles tuberías de suministro que contengan amianto. También se añadirá un protocolo de actuación para inspeccionar estas instalaciones.
Finalmente, se realizará un análisis de observación para comprobar la información previamente recibida. Para ello se realizará un trabajo de campo, inspeccionando y tomando muestras del interior de los edificios para evaluar la presencia de amianto.
Se prevé que estos trabajos tengan una duración de 6 meses.