La Diputación invertirá casi un millón de euros en Arrasate

La Diputación Foral de Gipuzkoa invertirá aproximadamente un millón de euros en Arrasate durante los próximos meses en la ejecución de dos proyectos. Por un lado, prevé la remodelación y conversión en rotonda del enlace de Lana (GI-627). Debido a la configuración del cruce existente, se forman movimientos conflictivos entre los vehículos y los peatones, ya que confluyen cinco ramales en ese punto. Por otro lado, el ramal que se extiende hacia el sur por la calle San Andrés es el enlace con el polígono industrial del mismo nombre.

Aintzane Oiarbide, diputada de Infraestructuras Viarias, ha subrayado que se pretende garantizar “la seguridad vial” y, asimismo, ha señalado lo siguiente: “La cooperativa Fagor Ederlan ha expresado su deseo de poner en marcha una nueva actividad en la zona, lo que supondría un aumento de tráfico”. La Diputación está inmersa en la labor de recuperación de la economía y, por tanto, quiere colaborar con las empresas del territorio. La diputada Oiarbide ha señalado que garantizar unas infraestructuras adecuadas  es una forma de ayudar a las empresas a que dispongan de una mayor competitividad. Por su parte, la alcaldesa de Arrasate, Maria Ubarretxena, ha declarado que “para Arrasate es muy importante que la Diputación, en sus presupuestos para 2017, haya incluído dos proyectos nuestros. Por un lado, y respondiendo a una petición de hace muchos años, se renovará la carretera de Bedoña  y, por otro lado, se construirá la rotonda de Lana, un punto muy transitado y peligroso, que tras las obras ganará en seguridad y utilidad” ha añadido la alcaldesa.

La remodelación del citado enlace tiene un presupuesto de 607.754 euros y la Diputación financiará las tres cuartas partes de dicha cantidad (407.754 €). El Ayuntamiento de Arrasate aportará 200.000 euros. En los próximos días se firmará el convenio entre la Diputación y el Ayuntamiento.

La Diputación prevé también  un segundo proyecto en Arrasate; concretamente, la estabilización de un movimiento de tierras existente en el camino al barrio de Bedoña, en la carretera GI-3554. Actualmente, el movimiento de tierras afecta directamente a la carretera y supone un peligro para los vecinos que utilizan dicha vía. Por tanto, para estabilizar dicha carretera, se construirá en la parte inferior una escollera de 78 metros de largo y 11 de alto. En la parte superior, además, se construirán dos muros de sostenimiento de 3 metros de alto y 13 y 32 metros de largo. Asimismo, se ampliará la carretera hasta 5 metros, a fin de que los vehículos puedan cruzarse con más facilidad. El plazo de ejecución de las obras será de tres meses y su presupuesto de 548.508,81 euros.

Los dos proyectos se ejecutarán a lo largo del año 2017.